Cuando hablamos del Arte de la Quiromancia, la línea del corazón tiene un papel preponderante. Ella nos marca los sentimientos, los amores y hasta la salud de nuestro corazón propiamente dicho. Esta línea se sitúa en la parte superior de la palma y bordea por debajo los montes de Mercurio, Apolo y Saturno, llegando incluso hasta el monte de Júpiter en ocasiones. Varios son los factores que influyen en el mensaje que nos transmite y te contaremos acerca de los más importante de ellos.
La Línea Perfecta
Todo en la vida tiene un modelo, un ideal a seguir, y en el caso de la línea del corazón, este está dado por una línea que sigue un recorrido curvo y cuya distancia entre esta y los dedos meñique, anular y medio, es igual a la medida de las falanges de dichos dedos. Su color debe ser de un rosado algo intenso, pero no demasiado.
En este caso, estamos ante una persona que es dueña de emociones y sentimientos equilibrados. Reacciona con mesura a las situaciones, incluso a las extremas y siente y vive la sexualidad de una forma controlada y satisfactoria. La primera diferencia que podemos apreciar es la distancia. Si la línea del corazón se encuentra más cerca del comienzo de los dedos que la longitud de las falanges, tal como indicáramos anteriormente, esto nos pone ante una persona exacerbada y algo fuera de control. Vive y siente las emociones de forma tan intensa que muchas veces se le van de control. En cambio, si la distancia a la que hemos hecho referencia es mayor, estamos ante una persona con una marcada frialdad de sentimientos.
El Recorrido
La forma en que la línea del corazón traza su recorrido es también determinante de la personalidad. Si este es paralelo a la Línea de la Cabeza y si se encuentra cercana a esta última, nos marca a una persona que deja que el cerebro domine a su corazón, pero que siente de forma muy intensa el amor y la duración de sus relaciones es larga, puesto que procura hallar la estabilidad en su vida y aspira al amor para siempre. Si la línea es cóncava, la persona es principalmente emocional y si es una línea convexa, ciertos traumas tienden a atenuar las emociones de la persona y, por ende, le costará más encontrar al amor verdadero, ya que siempre estará obstaculizando el vínculo amoroso con los demás.
La Terminación
Por último, te presentamos la variación que tiene que ver con la terminación de esta línea. En el caso de que su límite exceda el Monte de Júpiter, el cual se encuentra debajo del dedo índice, la persona es celosa, posesiva y egoísta. Si termina entre el dedo índice y medio, la persona es entusiasta y va alegre por la vida. Si se extiende hasta el propio monte de Júpiter, es una persona equilibrada y armoniosa, pero capaz de amar intensamente. Cuando termina debajo del dedo medio nos muestra a alguien muy indeciso, mientras que si sólo se extiende hasta el anular, podemos estar seguros de que se traba de una persona a la que le cuesta enormemente relacionarse con los demás debido a su espíritu pobre y escasa emotividad y amor por la vida en general.